"Castigo" corriente [Libre]

Y pensar que mi castigo iba a ser más duro...., pagar por mis acciones en el inframundo, o en caso de que hayan tenido misericordía de mi, cumplir misiones que beneficien a otros seres. El sólo hecho de imáginar que en lugar de una penitencia mucho más fuerte tendría que entrar a una escuela como un alumno más, no podía dejar de darme mucha risa. Ese día en que La Muerte estuvo preparando mi castigo parece haber estado un poco perezosa, después de todo, en varias ocaciones me he encontrado cara a cara con él.

Estoy caminando en este momento por los pasillos de Via Mortem, donde la luz del sol entra por las ventanas, dando de esta manera iluminación a este lugar, con mi uniforme del colegio y cargando dentro de mi mochilla sólo lo necesario para comenzar el primer día. No necesitaba de nada más que me pese demasiado ya que necesito un poco de comodidad a la hora de pelear, aunque estoy acostumbrado a cargar cosas pesadas, sólo no quiero llevar conmigo lo innecesario.

-Que pátetico, pensé que La muerte me iba a dar una sentencia más seria.- Reí con ironía mientras me dirijo hasta las puertas del salón del primer año, donde estoy seguro que se infestará de gente corriente. El sólo pensar en ello se me hace bastante tedioso, Quizás mi suplicio será tener que soportar a un montón de gente ruidosa durante todo un año, aún así pienso que La Muerte ha perdido su sentido de seriedad..., o tal vez no deba subestimar a ningún ser que ingresa a esta academia, cualquiera puede un día ser más poderoso de lo que imágino, lo que puede hacer mi estancia aqui menos aburrida.

Habia ido al salon de los de primer año pero no estaba muy seguro, nunca habia hecho demasiados amigos, eso en su mundo no era asi, la gente no se solia conocer en persona. Asi que le costaba hablar con grandes multitudes de gente y ademas solo conocia a dos chicas, Lilith y Alexia pero a ninguna la veia por ahi ¿serian de otro curso?.

Quizas se tenia que haber quedado en su cuarto, estudiaria lo mismo y quizas hasta mas. Suspiro y miro a todas esas personas qeu hablaban entre si y se quedo al fondo del aula, en la unica mesa que quedaba libre de dos, aunque él estaba solo, mientras escuchaba musica a traves de sus cascos. La mayoria no sabia para que servian dado qeu venian de un mundo mas retrasado tecnologimente que el suyo.

Miro al chico que acababa de entrar con curiosidad, seguramente seria su compañero de mesa dado que no habia mas sitio. Auron se encogio un poco, el chico parecia uno de esos matones que aparecian en las peliculas del Nido.

Entré en el aula casi a la fuerza, pues había algunos vigilantes que se encargaban de hacer que las normas se cumplieran, y tras escaquearse de varias clases, le piyaron. Le hicieron colocarse delante de la puerta del aula y entrar. Lo que no consiguieron por supuesto fue que se pusiera el maldito trajecito oficial de via mortem.

Finalmente, con cara de aburrido y de poco poquisimo interés, Jio abrió la puerta con una mano. Hola. Dijo con voz grave aburrido a la gente que había. ¡Genial! No hay sitio... entonces me las piro... Lo intentó, pero el profesor le indicó que cogiese una mesa y una silla que había apiladas al final del aula y las pusiese al lado de un chico que parecía de su misma edad. Tsss... quejandose, hizo lo que le digeron y al sentarse, saludó al chico. Hola. Entonces apoyó el codo en la mesa, y su cabeza en la mano.